Los tipos de chantaje que emplea este sujeto dependen mucho de la expectativa de éxito que tenga en base a experiencias anteriores, pero las más utilizadas son las siguientes:
Estrategia basada en la culpa. Quizás el más utilizado y sutil, basado en expresiones como
• Nunca pensé que llegarías a hacerme esto
• ¿Vas a dejarme así, después de todo lo que hice por ti?
• Allá tú con tu conciencia, pero menuda decepción que llevo contigo
Estrategia basada en la agresión. Su objetivo principal es generar miedo, para ello no duda en utilizar el castigo. Es la más directa. Utiliza expresiones como:
• Si no haces lo que te pido me voy.
• Como sigas con esta actitud rompo la relación
• Si no vienes se lo digo a…
Estrategia basada en la amabilidad. Es la más difícil de detectar, se utilizan las promesas para conseguir el objetivo, ofreciendo contrapartidas en el caso de que se haga lo que el chantajista quiere.
• Si me acompañas al concierto, luego ya te dejo en paz
• Si sigues conmigo te prometo darte lo que me pidas.
Tenemos que pensar que la víctima del chantajista se ve envuelta en una tela de araña que cada vez es más densa, lo que le lleva en muchas ocasiones a pensar en el suicidio como única salida a la situación de miedo, control y angustia que vive.
Pero … ¿Es posible salir de esa tela de araña?, radicalmente SÍ.
Primero tenemos que modificar nuestra forma de enfrentar y afrontar esta situación, para ello debemos de empezar por dejar de reforzar la sensación de control que tiene el chantajista sobre nosotros, debemos de empezar por decir NO. Piensa que estar en esa tela de araña no nos deja ver mas allá de nuestra realidad, busca una persona de confianza y cuéntale lo que está pasando, busca un psicólogo, o llama al Teléfono de la Esperanza, escucha como hay otras realidades diferentes a hacer la voluntad del chantajista, a sentirte como su marioneta. Descubre que no todo es tan negativo como él te ha hecho creer, si dejas de hacer su voluntad.
Piensa que todos cometemos errores, intenta reducir tu culpabilidad, responsabilízate buscando soluciones y aprendiendo de la experiencia.
Dentro de un ambiente de calma, intenta llegar a un acuerdo con el chantajista (aunque no suele funcionar)
Recuerda que te estás enfrentando a una persona muy hábil en el manejo de la comunicación y cuanta más información le des más les facilitarás el darle la vuelta a tus argumentos y es probable que te convenza o que te haga dudar. Prepara tus conversaciones con esa persona, adelántate a las respuestas, saca tus propias conclusiones, que te pueden ayudar a tener más recursos en la próxima conversación en la que te enfrentes con esa persona.
Céntrate en tu objetivo en las conversaciones, no te dejes enredar.
No permitas una sola falta de respeto, marca los límites, hazte respetar, no pienses que si cedes esa persona cederá, simplemente si cedes, le estarás dando motivos para que siga presionando, para que siga ese camino que le ha funcionado.
Nunca olvides que el cambio está en ti, no esperes a que la situación se ponga de tu parte, el cambio cuesta y en ocasiones da miedo o pereza, quizás es más fácil permanecer como estamos, pero es mucho más duro, mas invalidante, poco a poco te irás adentrando en un infierno del cual será más difícil salir.
Recuerda, pide ayuda, pero hazlo ya, no esperes más. Merece la pena ser libre.
Daniel López, psicólogo y voluntario del Teléfono de la Esperanza en Asturias